¿Qué es y cómo uso el proceso de Design Thinking para mi negocio?

Prices de Design Thinking, la alternativa para aportar ideas de calidad

La creatividad es una cualidad valiosa que yace latente en todo ser humano. En el mundo laboral tiene una gran importancia porque abre la puerta a nuevas innovaciones, ideas y proyectos.

¿Cómo se puede fomentar la creatividad para que despliegue todo su efecto? Aquellos que utilizan el proceso de Design Thinking en la empresa al menos crean buenas condiciones y se fortalecen para el futuro y sus nuevos requisitos, como el cambio digital o la globalización. Pero ¿Qué es el Design Thinking y cómo puede usarlo para su empresa?

Hoy os queremos hablar de este concepto, que puede que no esté muy ligado al mundo del SEO, de la publicidad digital o del marketing, pero que se 

¿Qué significa Design Thinking en las empresas?

Los desafíos deben superarse, por ejemplo, al desarrollar nuevos productos y servicios. Un enfoque sistemático ha demostrado su valor. Aquí es donde entra el proceso de Design Thinking, que es una herramienta eficaz para resolver problemas comunes.

Es un proceso que está destinado a producir ideas particularmente de alta calidad. Todo se sostiene con un equipo que trabaja en conjunto de manera interdisciplinaria. El trabajo se centra en tres factores: personas, rentabilidad y tecnología. Estos factores están siempre en igualdad de condiciones y en el Design Thinking se consideran la base para el desarrollo de una innovación realmente importante.

Para que el Design Thinking funcione en las empresas, tiene sentido establecer y adherirse consistentemente a reglas fijas de cooperación. No solo conducen a la armonía en el equipo, sino que también amplían el marco mental de cada individuo (o al menos lo mantienen abierto).

Algunas de las reglas son estándar en los procesos de equipo, otras son específicas del Design Thinking. Si lo desea, puede formular reglas adicionales, siempre que no tengan un impacto negativo en el proceso creativo.

  1. Regla 1: utilice visualizaciones con la mayor frecuencia posible.
  2. Regla 2: deje que los demás terminen de hablar. Solo una persona debe hablar a la vez.
  3. Regla 3: no hay malas ideas. Incluso lo que suena loco es bienvenido.
  4. Regla 4: tenga cuidado con las críticas.
  5. Regla 5: la cantidad importa. Un montón de buenas ideas son una gran base para una muy buena idea.
  6. Regla 6: evite las distracciones y manténgase en el tema.
  7. Regla 7: se fomenta el desarrollo de los pensamientos e ideas de los demás.
  8. Regla 8: busque el consejo de un tercero y también mire a las personas fuera del grupo objetivo.

El equipo: trabajo interdisciplinario en el proceso de Design Thinking y su importancia

Para poder desarrollar soluciones a un problema, es crucial mirar el tema desde muchas perspectivas diferentes. Si el equipo es heterogéneo, se beneficia enormemente de las diferentes perspectivas. Unir diferentes disciplinas. No es necesariamente el caso de que las disciplinas sean campos profesionales diferentes. La combinación de culturas, nacionalidades, géneros y edades también es de gran valor.

En el proceso de Design Thinking, el trabajo en equipo es primordial. En consecuencia, el lugar de trabajo debe, por supuesto, estar diseñado para permitir que la interacción fluya libremente.

Además de las estaciones de trabajo individuales, se necesita una sala común para todos los miembros del equipo, ya que hay muchas lluvias de ideas y debates. Los llamados conceptos de espacio móvil facilitan mucho el trabajo, especialmente cuando falta espacio. Por ejemplo, una sala de reuniones se puede convertir en una oficina en la que todos los lugares de trabajo estén separados, según los requisitos. La solución debe ser tan flexible como el equipo.

Las herramientas deben ser igual de sencillas. Las pizarras con mucho espacio ofrecen suficiente espacio para pensamientos recopilados. Los tableros magnéticos también son útiles, incluso si las imágenes y similares son importantes. No deben faltar blocs de notas, post-its y bolígrafos; después de todo, es molesto cuando se pierden ideas valiosas porque no hay un bolígrafo a mano.

Entonces, antes del proceso real de Design Thinking, que se explicará en detalle en los próximos párrafos, hay cierta preparación para mantener la flexibilidad.

Design Thinking es un proceso iterativo

Con la ayuda de estructuras, resolver problemas es mucho más fácil. No es de extrañar que el proceso de Design Thinking se lleve a cabo paso a paso. El modelo de proceso requiere seis fases y ha demostrado ser una herramienta útil. 

El procedimiento que utiliza bucles iterativos tiene un efecto muy positivo, especialmente en la cultura del error. Se pueden cometer errores en el Design Thinking porque se supone que las personas aprenden de los errores. Por lo tanto, el tratamiento de los errores está abierto. Esto permite relajar los límites del pensamiento y la imaginación. Para desarrollar innovaciones, es importante la mentalidad correcta de las personas responsables.

Fase 1: comprensión

Al comienzo del trabajo hay una comprensión del problema subyacente. Todos los miembros del equipo que participan están dedicados al problema y sus peculiaridades. Está claro que, sin una comprensión más profunda, ninguna innovación es posible. Las preguntas y definiciones ayudan a comprender el problema.

Fase 2: observación

Las personas y sus necesidades necesitan una solución que se adapte a ellos. Pero ¿Quién es el grupo objetivo de todos modos? En la segunda fase, el equipo debe obtener información importante a través de la observación, encuestas y, si es necesario, medidas adicionales. Una investigación exhaustiva requiere que el equipo salga de la oficina y entre en contacto real con los interesados. Un enfoque sin prejuicios es decisivo para el éxito, porque solo así es posible la objetividad.

Fase 3: punto de vista

Ahora el equipo se reúne para una sesión de lluvia de ideas para obtener la esencia de la información recopilada hasta el momento. El equipo observa las reglas anteriores a más tardar desde esta fase hasta el final del proyecto.

Primero, cada miembro del equipo del grupo presenta su conocimiento personal actual de la pregunta inicial. En esta conversación, el equipo trata el contenido en detalle y lleva a cabo un diálogo intensivo para desarrollar pensamientos e ideas de manera efectiva. Al final de la lluvia de ideas, el equipo tiene un punto de vista común.

Para lograr este objetivo intermedio, son posibles una gran variedad de medios, que ayudan a la reflexión conjunta. Estos incluyen, entre otras cosas:

  • Visualizaciones,
  • Bocetos,
  • Técnicas de cuestionamiento,
  • Resúmenes,
  • Consideración de casos extremos,
  • Técnica de inversión.

¿Qué se entiende por técnica de inversión?

La técnica de inversión le ayuda a ver las cosas desde una nueva perspectiva. La nueva perspectiva es inusual, pero a veces amplía notablemente la gama de ideas y, por lo tanto, vale mucho la pena.

Se trata de convertir algo en lo contrario. Por ejemplo, en lugar de simplemente hacer la pregunta común ¿Por qué alguien compraría el producto? ahora se buscan razones de por qué no se debe comprar el producto. Este enfoque simple abre nuevos horizontes en el desarrollo de productos, y los errores también se notan en una etapa temprana del proceso general.

Fase 4: lluvia de ideas

La lluvia de ideas conjunta continúa, pero en una nueva fase con un nuevo objetivo intermedio. El Design Thinking está ahora en su apogeo creativo. Para no debilitar la creatividad, está permitido usar otro método en lugar de la lluvia de ideas. Sin embargo, el foco de la acción conjunta está en el desarrollo de conceptos. En resumen: Todos están trabajando en generar nuevas ideas.

En primer lugar, no se trata de encontrar las mejores ideas. Más bien, la cantidad cuenta. Muchas ideas diferentes son bienvenidas, porque en este momento nadie puede decir con certeza si una idea aparentemente incolora finalmente logrará un gran avance.

Luego, el equipo tiene que clasificar y resumir las sugerencias recopiladas y ponerlas en una estructura significativa para mantener una visión general. Las ideas son evaluadas. Algunas de ellos simplemente serán mejores que otras. Cuáles son estos depende de si cumplen con tres criterios importantes:

  • Atractivo,
  • Económico,
  • Factible al mismo tiempo.

Esto se remonta a los factores: personas, rentabilidad y la tecnología, que están en el corazón del proceso. Dado que al grupo objetivo se le debe dar un poco más de importancia en el Design Thinking que en la rentabilidad y la tecnología, el equipo califica el atractivo de la idea por encima de los otros dos criterios.

Fase 5: prototipo

Un prototipo tiene la ventaja de que puede probar sus ideas en él y ver más fácilmente si funcionan y dónde todavía hay potencial de mejora. Por lo tanto, la creación de prototipos sigue como la quinta fase para desarrollar aún más el proyecto.

Es importante no poner demasiado esfuerzo en los prototipos, porque no vale la pena en este momento. Los modelos simples o los juegos de roles suelen ser suficientes para lograr el objetivo de la fase. En esta fase es necesario en muchos casos un procedimiento iterativo, de forma que incluso se pueden crear varios prototipos, algunos de los cuales se vuelven a descartar.

Fase 6: refinamiento

Los conceptos que se obtuvieron del prototipo ahora están siendo refinados por el equipo. Esto también requiere a veces varios bucles, porque ahora se trata realmente de los toques finales.

Al final de la sexta fase, debe haber un producto centrado en el usuario que se ajuste de manera óptima al problema identificado al principio y al grupo objetivo respectivo. Esto significa que los resultados de todas las fases anteriores se incorporan en este punto.

Donde el Design Thinking alcanza sus límites

El proceso de Design Thinking es cada vez más importante en las empresas. Aunque originalmente provenía de la escena de las empresas emergentes, ahora está conquistando círculos más conservadores. Para muchas empresas, vale la pena innovar de esta manera. Pero también hay críticas al Design Thinking. Los tomadores de decisiones en las empresas deben ser conscientes de que el Design Thinking tiene sus límites.

Una crítica que se expresa a menudo gira en torno a la importancia del grupo objetivo y sus necesidades, a las que se debe dar el mayor peso. Esto es bueno para la persona interesada, pero se pueden olvidar otros aspectos. Un ejemplo: Un producto que es útil para las personas también puede ser perjudicial para el medio ambiente. Design Thinking no tiene control para esto. Por lo tanto, los propios desarrolladores deben asegurarse de que el resultado final realmente funcione.

Además, existen dudas sobre si el Design Thinking realmente puede crear las principales innovacionesque las empresas emergentes y las convencionales desean tan desesperadamente. En muchos casos, los resultados finales son mucho más realistas o simplemente una extensión de alta calidad de un concepto ya existente. Por lo tanto, los empresarios siempre deben tener en cuenta que el Design Thinking no es una solución general.

El Design Thinking es uno de los métodos más innovadores para generar ideas y avances, desarrollando la creatividad de las personas o de los equipos. Su uso está muy generalizado en el mundo del marketing y de los negocios.

Confiamos en que este artículo sobre el Design Thinking os haya resultado de interés, aplicando esta metodología en vuestros proyectos. Además, como siempre, estaremos encantados de resolver todas las dudas que tengáis sobre el concepto de Design Thinking o cualquier otro, ¡os leemos!

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